Manny Pacquiao asegura que no tiene límites

LAS VEGAS. Para nada importan sus más de 40 años de edad; tampoco el que vaya a enfrentar a un boxeador 10 años más joven; mucho menos que una buena parte de los analistas y aficionados de boxeo consideren que sus cualidades profesionales están agotándose.

Pacquiao está convencido de que aún tiene en el tanque para vencer de manera contundente a Keith Thurman este sábado en la pelea principal de la función de boxeo del MGM Grand Arena de Las Vegas.

Sabe que será complicado en todos aspectos, incluido el aspecto físico más allá de la edad. Thurman es más alto, tiene mayor alcance y muy probablemente estará visiblemente más pesado que el filipino cuando suban al cuadrilátero el sábado.

Pacquiao está consciente que una derrota puede significar el final de su gloriosa carrera, que cuenta campeonatos mundiales en ocho categorías diferentes.

También reconoce que el tiempo no perdona jamás a ningún atleta profesional.

"Me encanta esforzarme todos los días, pero a veces mi cuerpo no responde", dijo Pacquiao. "Necesito tiempo para descansar y recuperarme. Esos son los cambios en comparación con cuando eres joven. Hay un poco de ajuste en términos de preparación y recuperación de su cuerpo.

"Parte del plan ahora es que tengo descansos entre entrenamientos que antes no tenía", agregó. "Por ejemplo, después de ciertas sesiones, tengo día libre después. Empujamos y empujamos todo lo que podemos. Pero el problema es que si estoy cansado y mi cuerpo no se recupera del descanso de la noche a la mañana, no empujamos tanto".

El filipino asegura que si sigue en el boxeo es por la motivación de competir y el gusto por el boxeo, además de demostrar que puede más allá de lo que muchos piensa.

"Hace años que están todos convencidos de que mi carrera terminó", señaló Pacquiao (61-7-2, 39 KOs). "Y aquí sigo. Es difícil y requiere mucha disciplina. Pero amo el boxeo, amo a mis aficionados y me encanta seguir en este ambiente".

El filipino ha ganado cuatro de sus últimos cinco combates. El único que "perdió" fue contra Jeff Horn, al que los jueces dieron la victoria, cuando la gran mayoría que observó el combate consideró que Pacquiao ganó.

En su más reciente pelea, derrotó de manera clara Adrien Broner, apenas en enero pasado.

"Aún puedo boxear", reiteró. "Esta es una de las peleas más importantes de mi carrera. Tengo que probar que a los 40 años aún puedo pelear contra boxeadores de muy alto nivel".

Su rival, Keith Thurman (29-0, 22 KOs), de 30 años, está invicto en 29 peleas profesional, incluyendo 22 nocaturs. La última vez que perdió fue cuando era amateur en el torneo eliminatorio de la selección nacional de boxeo para representar a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Beijing.

"Siempre quise ser recordado en el deporte del boxeo", dijo Thurman. "Voy a enfrentar a una leyenda, a Manny Pacquiao. Sé que un triunfo me empujará al siguiente nivel. Voy a ganar y retirar a Pacquiao".

El filipino dice desconocer su futuro inmediato y futuro. Ni siquiera amenaza con la victoria del sábado.

Sólo dice que será una pelea explosiva, de buen boxeo y con dos peleadores agresivos dentro del cuadrilátero.

"Nuestro enfoque es pelea a pelea", mencionó.

Tampoco rechaza ni propone una segunda pelea contra Floyd Mayweather, quien está retirado del boxeo desde el 2017.

"Todo lo que puedo decir es que estoy activo en el boxeo", sentenció. "Estoy activo y él tiene que decidir si quiere regresar. Dice que está retirado. Yo estoy activo, así que pienso que siempre pelearé contra el que sea".

Fuente: https://www.espn.com.ve